Cuida las medicinas

Durante la gestación es importante que no se administren medicamentos innecesarios, pero es preciso no suprimir aquellos esenciales para la salud de la madre.
No ingieras productos por iniciativa propia, sólo por prescripción médica. La razón es simple, aún no se han determinado todos los efectos que tienen en el feto y es mejor prevenir cualquier mal. Hasta donde sabemos, los medicamentos, en mayor o menor medida, llegan al feto por la placenta.

Algunos defectos de nacimiento se producen por las medicinas, pero también la herencia, la exposición a los rayos «X», factores químicos y ambientales pueden provocar insuficiencias.

Al principio del embarazo, es decir, desde el momento de la concepción hasta la llegada e implantación del óvulo en el útero, existe la probabilidad de que la medicina pueda liquidar al embrión. Después de la onceava semana es posible que los fármacos provoquen defectos en el bebé.

El daño puede ocurrir antes de que la madre haya perdido un periodo menstrual o incluso antes de percatarse que está encinta. En resumen, el bebé es más susceptible durante los primeros tres meses.