Cuidar la salud antes de concebir

Un embarazo es algo muy hermoso, pero también debe ser monitoreado por que los riesgos siempre están presente, y aunque la atención prenatal ha cambiado casi por completo en los últimos 100 años, siempre hay un riesgo que hay que atender.

Tan solo hace 75 años, casi el 66 % de las mujeres daban a luz en casa sin analgésicos. La práctica moderna de la obstetricia implicó una tendencia hacia los partos en hospitales.

Los primeros problemas en esta especialidad médica fueron tanto el debate sobre el uso de los analgésicos durante el parto, como la búsqueda de un método seguro para la madre y para el bebé.

Las enfermeras desempeñaron un papel activo en la promoción de los programas de atención prenatal antes de que los partos en hospitales se convirtieran en la norma y los datos demostraron que la atención prenatal reducía la mortalidad infantil.

Las revisiones rutinarias de presión arterial, orina y peso se incluyeron en las visitas de atención prenatal. Desde entonces, se han agregado pruebas para detectar otros factores de riesgo para la madre e indicadores de un desarrollo fetal anormal.

Una entrevista realizada al Dr, Carlos Hernández en este portal,  hablaba de la necesidad de que el parto fuese algo «agradable; lo más cercano al ambiente de la casa».

En la década de 1980, la atención prenatal se centraba sobre todo en tratar con rapidez las complicaciones del parto, en lugar de promover el cuidado y la prevención. Si bien el protocolo actual para las consultas prenatales suele comenzar en el primer trimestre, los investigadores ahora están investigando la efectividad de las consultas preconcepcionales.

Las consultas preconcepcionales incluyen asesorías para las mujeres sobre los pasos que pueden tomar con el fin de prevenir las enfermedades y promover su salud y la de su bebé.