La vagina después del parto
Una de las preocupaciones más comunes de las madres cuando se está acercando su fecha de parto, además de la salud de su bebé, es cómo cambiará su cuerpo después del nacimiento, específicamente el área vaginal.
«¿Mi vagina será más grande?» «¿Tendré menos sensibilidad?» «¿Será diferente?». Lo cierto es que cada parto es diferente y, por consiguiente, no hay una sola respuesta para todas estas dudas. Todo dependerá del caso de cada madre. No obstante, ofrecemos algunos datos que le servirán de mucha ayuda para orientarse en este aspecto y saber qué esperar de los cambios que ocurrirán después del parto.
¿El color será diferente?
La acción de las hormonas en el embarazo provoca que la vagina y el ano tengan un tono más oscuro. El color original volverá semanas después del parto.
¿La vagina será más grande?
Luego del parto, la vagina quedará distendida e hinchada. No obstante, con el pasar de las horas, las contracciones vaginales harán que la misma se vaya reduciendo progresivamente. Durante los siguientes días la vagina continuará reduciéndose, así como también desaparecerán los moretones y la hinchazón.
¿Qué ocurre con el parea del perineo?
Si durante el parto vaginal usted presentó un desgarro o le fue realizada una episotomía, esta zona debe ser cuidada adecuadamente. Deberá esperar al menos seis semanas después del parto antes de reanudar su actividad sexual. Conviene que consulte con su médico antes de volver a tener relaciones sexuales con su pareja con el objeto de determinar si usted se encuentra totalmente recuperada de las secuelas del parto.
¿De qué manera se puede recuperar el tono muscular?
Mediante el ejercicio, usted podrá recuperar el tono muscular. Recomendamos la realización de ejercicios Kegel, especiales para trabajar la zona pélvica.
Hable con su médico, quién le indicará en qué momento de su recuperación posparto puede iniciar con una rutina de ejercicios Kegel.
Obtenga más información sobre estos ejercicios en: /articulo/ejercicios-de-kegel
¿Por qué lubrica menos?
La acción de las hormonas en el embarazo hace que usted tenga buena lubricación al momento de la actividad sexual. Luego del parto, los niveles hormonales descenderán y, por consiguiente, notará que durante la actividad sexual usted lubrica muchísimo menos. Esto puede acentuarse si usted está amamantando.
Si este es su caso, aplique lubricante antes de la actividad sexual para reducir la incomodidad.