Los programas televisivos que gustan a los niños

Uno de los espacios infantiles que ha cobrado mayor interés entre los pequeños es los Teletubbies, producido por The Itsy Bitsy Entertainment Company para Estados Unidos, Canadá y Latinoamérica. Emilia Nuccio y Lenda Ramos son las responsables de la venta de esta serie, quienes consideran que el éxito de este programa se debe a que está dirigido a niños de 1 a 4 años, un mercado hasta entonces inexplorado y bastante desasistido. Haber apuntado a este target fue parte del triunfo, además de las imágenes y la estética de la pantalla, que vincula a los menores dentro del espacio.

Lo que poca gente sabe es que los Teletubbies son de 6 a 7pies de altura, por lo tanto las grabaciones no se hacen en estudios sino en una colina de Inglaterra. El doblaje al español ha permitido que desde su lanzamiento, en 1998, el público en América Latina acepte e identifique a cada uno de los personajes. La ejecutiva Lenda Ramos afirmó que «existe una demanda en crecimiento y los temas educativos seguirán presentes en nuestros productos».

La acción no se traduce en violencia

Los animados japoneses tienen su cuota de éxito entre los niños. Sólo basta con ver cómo las película Los Caballeros del Zodíaco, Lucifer un ángel malvado que surge del abismo decidido a traer el Apocalipsis con sus propias manos y Dragon Ball Z son muy apreciadas por el público infantil. Al parecer los pequeños se distraen con figuras que realizan grandes hazañas y están en permanente actividad. El programa de los Teletubbies aunque tiene un corte didáctico y es para bebés, contiene elementos visuales de mucha dinámica y humor.

Barney y Plaza Sésamo, orientado a preescolares de 4 a 7 años, merecen una mención aparte. Se han convertido, con el tiempo, en verdaderos clásicos infantiles. El principal objetivo es enseñar con diversión en capítulos de corta duración a fin de mantener la atención de su público.

Juana, la iguana es otro personaje que tiene gran aceptación. Sus productores inicialmente comenzaron a vender las historias de Juana en cintas de VHS. El negocio prosperó tanto que ahora la iguana tienen su propio programa en la televisión y su imagen se conoce en Venezuela, Miami y otras ciudades de América Latina.