¿Qué causa el dolor de útero al comienzo del embarazo? (Parte I)

El dolor de útero al comienzo del embarazo es una experiencia común y tiene una variedad de posibles causas. Si bien la mayoría de estas no son graves, algunas requerirán atención médica.

Durante el embarazo temprano, el útero es mucho más pequeño de lo que será en el segundo y tercer trimestre. Por lo tanto, es poco probable que el dolor en esta parte del cuerpo se deba a la presión del útero que empuja a otros órganos o a la fatiga del exceso de peso en el útero.

Sin embargo, el dolor de útero sigue siendo uno de los síntomas más comunes al comienzo del embarazo. A continuación observamos las posibles causas, las cuales incluyen cambios en los músculos y en las hormonas.

Causas comunes:

1. Dolor de ligamento redondo.

El dolor del ligamento redondo ocurre porque el útero está creciendo y los ligamentos que lo sostienen deben moverse para acomodar el crecimiento. Este dolor suele ser una sensación punzante que puede ocurrir en uno o ambos lados del útero. Puede ser repentino y generalmente solo dura unos segundos.

En muchos casos, el dolor del ligamento redondo aparece sin previo aviso. Algunas mujeres notan más dolor al toser o estornudar, o al darse vuelta o cambiar de posición en la cama. El dolor también puede ocurrir cuando una mujer embarazada se mueve de una posición sentada a una posición de pie.

Aunque puede ser incómodo, el dolor en el ligamento redondo no es peligroso o una señal de que algo está mal.

2. Dolor en el suelo pélvico.

Muchas mujeres experimentan dolor en el piso pélvico durante el embarazo. Los síntomas pueden aparecer temprano, especialmente en un segundo embarazo. El estiramiento del útero es una de las causas del dolor, pero los cambios hormonales también pueden afectar cómo se sienten y se comportan los músculos del piso pélvico.

Las sensaciones de dolor en el piso pélvico varían, y una mujer puede sentirlas cerca de su útero o en su vejiga, vagina, espalda o abdomen.

Algunas mujeres con dolor en el piso pélvico tienen antecedentes de lesiones en el piso pélvico, como desgarro o episiotomía durante el parto. Muchas tienen músculos débiles del piso pélvico, lo que puede causar síntomas adicionales, como fugas en la vejiga al saltar o estornudar.

El dolor del piso pélvico no dañará al feto en desarrollo, pero puede empeorar a medida que avanza el embarazo.

3. Calambres.

Al principio del embarazo, muchas mujeres experimentan calambres que se sienten similares a los calambres menstruales. La expansión del útero o el aumento de los niveles de progesterona pueden ser responsables de este síntoma.

A algunas mujeres les preocupa que los calambres sean un signo de pérdida del embarazo. Los calambres severos que empeoran constantemente durante muchas horas pueden advertir la pérdida de un embarazo, especialmente si hay sangrado. Sin embargo, para muchas mujeres embarazadas, los calambres son una molestia temporal y no una señal de alerta.

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