Las heces del bebé: lo normal y las señales de alarma

Durante los primeros meses de vida del bebé, la madre debe estar muy atenta a todos los cambios del niño, ya que algunos representan que hay un problema con su salud. Uno de estos cambios a tener en cuenta son las heces, ya que son un signo de que el sistema digestivo del bebé está funcionando bien y, en otros casos, puede significar que hay un problema de salud.

Por ello, ofrecemos unos datos que le servirán de mucha utilidad al momento de identificar qué es lo normal y cuáles son las señales de alarma en las heces del bebé.

¿Cómo son las primeras deposiciones?

Muchas madres, sobre todo las primerizas, tienden a asustarse con las primeras deposiciones de su bebé.

Las primeras deposiciones se llaman meconio y son de color verde. Estas heces son el resultado de una mezcla entre los restos de las secreciones y mucosidades que el bebé ha ingerido dentro del vientre materno.

¿Cómo son las deposiciones durante la lactancia materna?

La lactancia materna es un período en el que el bebé es amamantado por su madre durante al menos 6 meses, en donde recibe todos los nutrientes que necesita para crecer sano y fuerte de la leche materna.

En dicho período, las heces del bebé se caracterizan por ser ligeras, es decir, no muy sólidas; además de tener una coloración anaranjada. Estas deposiciones suelen emitir un olor muy suave.

¿Cómo son las deposiciones cuando se le da el tetero?

Una vez que la madre empieza a darle tetero a su bebé, las deposiciones tienden a volverse más oscuras y más firmes, además de desprender un olor más fuerte que con la leche materna.

¿Cómo son las deposiciones cuando el bebé empieza a comer sólidos?

Una vez que el bebé empieza a comer alimentos sólidos, las heces adquieren mucha más consistencia y toman el color del alimento que el bebé haya ingerido. Es decir, si el bebé come vegetales de color verde, las heces tienden a adquirir ligeramente esa tonalidad.

¿Cómo saber si algo malo ocurre?

Para identificar las señales de alarma, deberá tener en cuenta lo siguiente:

  • Si las heces son de color blanco o muy claras
  • Si las heces tienen rastros de un sangrado

Si el bebé evacúa heces con consistencia muy ligera varias veces seguidas